domingo, 25 de diciembre de 2011

Abrir puertas.

Hoy quiero abrir más puertas.

Durante toda mi vida coqueteé siempre muy de cerca con la felicidad, a pesar de todas las adversidades que enfrenté en mi existencia, aprendí a disfrutar de este viaje, sentir a pleno y mirar siempre desde el cristal del positivismo.
Tendría unos seis años, aún no sabía leer, pero me encantaba mirar las imágenes impresas, el contorno de las letras y la figura que creaba el conjunto de letras en un escrito.
Ya cuando acudía a la escuela de mi barrio y aprendía mis primeras letras, sabía que todo aquello escondía un mundo maravilloso. No tenía dinero para comprar libros, yo creaba los míos, recortaba revistas y periódicos los guardaba y después los leía con pasión.
En aquella época vivíamos en plena dictadura, había una sensación de más seguridad y por lo tanto todo era más abierto, en verano si la familia quería y obligada por el calor dormía en la intemperie o en el corredor, había menos candado y menos rejas. A lo que voy es que me gustaba mucho abrir puertas, me parecía maravilloso siempre abrir una puerta, porque más allá del umbral había algo increíble por ser descubierto, como decía Platón: “La sabiduría está oculta bajo un velo, el hombre debe descubrirlo y conquistarlo”. En todo ambiente uno abre cosas y descubre siempre algo mágico, una puerta, ventana, una revista, un libro una página web, un blog.etc.
En nuestras vidas nos pasamos abriendo puertas, algunos las abren, les gusta lo que ven adentro y se sumergen en él, otras no tanto y las cierra bruscamente y ya no se animan a volverlas a abrir.
Hoy te invito a que abras las puertas que conducen a tí mismo, abre la puerta de tu alma y descúbrete día a día. El primer descubrimiento es que no te conoces tanto como pensabas, te miras al espejo y dices –y este quién es?-
Hoy debo conocerme mucho más para comprender a mis semejantes, y aceptarlos tales como son y no intentar cambiarlos. Cuando me conozco más a mí mismo me valoro más y valoro todo lo que soy, todo lo que hago.
Imagina que éntras a un castillo abandonado, el cielo es gris, te paras frente a aquella enorme, pesada y crujiente puerta, la abres muy despacio, te tiemblan las manos y el corazón te late a mil. Adentro todo está obscuro y misterioso todo es tan desconocido, tan apático, tan lúgubre. Ese castillo es tu alma y lo acabas de abrir y te tienes miedo a ti mismo, miedo a conocerte mejor y no comprenderte a tí mismo.
Necesitamos ser más humano, es necesario deperdigar más amor, más sensibilidad y mas comprensión al mundo que nos rodea. Despojémonos de las cosas materiales y cultivemos todo valor que podrás llevar dentro tuyo a la hora de la partida. Conócete a ti mismo, ámate más y podrás amar al mundo y verás la vida desde otro matiz, yo mientras tanto seguiré abriendo más puertas.
*f.j.s.r.

La Soledad

La soledad.

La tarde del domingo estaba silenciosa, no me acuerdo que mes era, pero estábamos a finales del año 1980, tenía 7 años y estaba bajo una planta de guayabo tratando infructuosamente de bajar la fruta más rellenita y más madura con una takuara, y la guayaba desde la punta de la planta parecía reírse de mi torpeza en el intento. Acabábamos de mudarnos por tercera vez desde que tenía conciencia.

Estaba en la casa de Doña Alicia la dueña de los terrenos donde vivía desde chico y dónde volví junto a mamá hace algunos años. Cuando por fin pude bajar aquella apetitosa fruta me senté feliz sobre un tronco a devorarla, mientras mis caninos y mis incisivos inyectaban en la carne de aquella fruta a la vez escudriñaba el horizonte. Por primera vez me di cuenta que aquel silencio y aquella soledad sería mi disfrute y mi momento favorito que me acompañaría toda la vida. Adoro estar solo. Soy tan charlatán y pedante cuando hablo con alguien más que me aborrezco a mí mismo, pero bueno soy así.

Esta palabra que ubiqué como título siempre me pareció curiosa, quizás porque ella me permite pensar y meditar sobre muchos temas, relajo mi mente haciendo catarsis y mezclando ideas y volviéndolas a ordenarlas. Nadie pone peros a mis pensamientos a mis aseveraciones, sólo yo y mis ideas, cuando tengo lápiz y papel las anoto, si estoy frente a un teclado de mis dedos fluyen chorros de agua cristalinos que brotan de entre piedras de un cerro, están fresquitas, más frescas, ya están frías, ya rozan el congelamiento. Lees, escribes, dices vives; o callas y mueres. Los que no dicen o no escriben lo que piensan son tan egoístas e ingratos con la vida que dio tanto para que produzcas algo, cuando eras niño te enseñaron a leer y a escribir, para qué?… no es para irte a la despensa y decir-doña..dame medio kilo de galleta- no, la vida te dio todo en tu niñez, es hora que tú lo devuelvas en poesías, ensayos, frases lo que sea.

A mí, la soledad me permite y me permitió todo eso. Si estoy con un grupo de amigos y compañeros de trabajo no puedo hacer todo esto. Si digo gordo fija que mi interlocutor dirá flaco, - yo soy de Cerro Porteño..ahh..no que puana..yo soy de Olimpia. No, el mejor jugador de la historia es Messi..tas loco vos fue Alfredo Di Stéfano..y así…siempre alguién te pondrá la contra.

Pero cuando mis interlocutores son un lápiz y un papel, ellos plasman lo que yo les dicto sin chistar, sin contrariar. Mi mente viaja a la velocidad de la luz y trae ideas fantásticas, reales, lugares imaginarios, verdaderos. Ya las críticas vendrán después alguien en Facebook pondrá ME GUSTA..otros NO ME GUSTA o quizás nadie pu..lo lea, pero ya están pues, ya parí una idea y ya creció ahora es un ensayo de la soledad y ahora tú lo viste crecer ya es todo un hombre es más, tú, amigo/amiga lector/ra lo estás confirmando le acabas de dar otro soplo de vida.

Otros dirán -la pucha..porque escribes en Facebook, sabes bien que todo lo que escribes o pegues ya sean chistes, chismes, poemas, fotos tuyas en pijamas, fotos de tu perrito, lorito, pollito every thing, ya no te pertenecen sólo pasan a engrosar la cuenta bancaria del gurú de las redes sociales Mark Zuckerberg..así pio se escribe. Si. Y no sé, o que usan la información de las personas suscritas para hacer negocios y bueno. Demasiados idiotas ko ya vamos a ser para pensar que toda esta infraestructura es gratis, estamos en la era del conocimiento man. Estamos en la era de todo tiene precio, todo se compra y se vende y cada cosa aqui conduce a la faltriquera de alguien más preparado y más vivo.

El 80 por ciento de los que utilizan estas redes sociales: ese pajarito patético que te permite sólo 140 carácteres, el h5, My space, Ortkut y demás muertos, se planeó para el negocio, se pensó en la gente como tú y yo. Los solitarios, ermitaños, viudos, exiliados, separados, chongos que buscan chongas y viceversa, carceleros, curas párrocos, todos. Sino este negocio se cerraría al día siguiente. Entonces a lo que voy, escriban, rian, puteen, pataleen, vomiten si quieren pero úsenlo con más utilidad, para eso fue creado.

Cuando escuché por primera vez la palabra FACEBOOK, fue a comienzos del año 2007 fui corriendo a un ciber, desembolsé mis 6 mil guaraníes que tenía en mi bolsillo, me senté y teclee en Google esa palabra y traté de suscribirme, en esa época sólo existía la versión en inglés, mi tiempo de una hora ya estaba por expirar, miré la cara del encargado del ciber y babeaba por mis otros 6 mil que creyó que le iba a dar de vuelta, pero aún no podía incrustar mi nombre como socio de aquel nuevo negocio en puerta que covertiría al joven yankee en uno de los pendejos revelación más rico del mundo, y esa palabra rara que escuché ya resonaban en tv, radios, diarios corría como reguero de pólvora en la web, hasta que 4 meses después recibí en mi correo la noticia de unos vagos ya me agregaron como amigos en el nuevo fb.

Lo primero que hice fue escribir los nombres de escritores famosos, periodistas, locutores y demás ñembo intelectuales para que sean mis amigos y aceptaron pero nada. Nada, no aportaron nada y hoy sigo en lo mismo sigo esperando que escriban como lo hacen en sus lugares de trabajo o digan cosas cuando los escuchamos en las radios, o los leemos en sus blogs, pero bueno quizás no son buenos comunicadores, o no están tan solitarios como nosotros, o no quieren aportar plata para MZ, pero los miembros de este engendro casi no tiene amigos físicamente, sólo compañeros de trabajos, de estudios, etc.

La soledad es materia prima para estas irónicamente llamadas redes SOCIALES, la tecnología te tira a aislarte cada día más, si no fíjate nomas en un cumpleaños, en un asado o vos pensás que los asistentes a estos encuentros SOCIALES dejan sus: tablests, smartphones, nokias, Samsung, BB, Motorola, 1100, etc. No. Vos le hablás a la chica y ella deleque twitea con otro, o en una mesa el tipo teclea a full con la chica de la mesa pegada a la de él, y a un grupo uniendo cabezas para sacar fotos para luego alzarlas. La tecnología te condena a la soledad, tu cabeza te inclina hacia esa pantalla brillante.

Un tiempo tenía un negocio de ventas de celulares y minicargas, se venden carcazas, yuyos para tereré y a mil la limón. Y bueno. Una cliente fiel, una señora que venía dos o tres veces al día con 4 hijos escalerita en fila, uno en sus brazos y otro en la panza y pedía-dame minicarga por 2 mil-, le quería decir –ehona ejogua galleta mbae doña- (Andá comprá galletas) para los chetos/as. Pero no, no podía patear pues mi olla. Y asi. Esto es todo lo que quería compartir con ustedes amigos/as ATENEO’S. Como decía Steve Jobs: Sigan hambrientos de conocimientos y sigan con las ideas alocadas, eso tarde o temprano te llevará a buen puerto. Buenas noches y hablando de minicarga…alguien me puede pasar 2 mil’i porque a tigo ya le debo 7000 + 700, y yo pensé que por la transferencia se pagaban en el fútbol nomás, he’i Personal. :O . Yau yes………..*f.j.s.r.

Mis tres amores.

Mis tres amores: la noche, el silencio y la brisa.

Las noches son hermosas, y las amo, sólo que tengo un dilema; en el día la espero tanto, pero me aterra saber que cuando llegue el momento de estar sola con ella, me acechará su mirada obscura y empezará a cuestionarme mis actividades del día, me dirá: “por qué no hiciste esto?, por qué hiciste esto, o simplemente… es tan pobre lo que produjiste hoy", pero me halagas al decirme que mi cabeza reposa en la almoada con la convicción de llevar algo de conocimiento acumulado del día.

Quisiera conocerte más y espiarte de día, cuando era niño me preguntaba siempre qué hacía la noche cuando llegaba el día y el sol asomaba?. Ahora quiero encontrar una respuesta lógica y contestarme a mí mismo que la noche nunca se va, sólo nos alejamos nosotros de ella.

Ella tiene un cómplice se llama silencio, juntos me brindan tanta tranquilidad, tanta paz, tanta emoción y tanta inspiración como la de esta noche, y te extrañaría un montón si dejara de verte, no me entristece en las mañanas porque te marchaste, porque sé que te mereces un descanso o tal vez tu capa necesita cubrir a otros seres de otros lares.

La brisa es tu joya dorada, la usas para acariciar mejillas de tus seres preferidos, la usas para secar las lágrimas de los desfallecidos, la usas para meterte en el cabello de un niño que duerme dulcemente en su cama, la brisa son tus brazos, manos y dedos.

Tu competencia es la luz de la luna, quiere invadir tu recinto, quiere poner luz donde tú pones sombra, de un codazo quiere lanzarte al margen, y tú no lo permites, te ayuda la nube para cubrirla un rato.

Te acompaño casi siempre con un libro, aunque a veces me seduce el teclado y me pongo a escribir como ahora. Me ayudas a escuchar nítidamente mi voz interior, ordenar mis pensamientos y aclarar mis sentimientos, me das tanto sin pedir nada a cambio. Trato de estar más tiempo contigo, y libro una batalla campal con el sueño, suelo perder batallas pero nunca la guerra y mañana cuando no te marches, sino sólo des un paso más, estaré de pie con el trinar de los pájaros a esperar de vuelta a tu encuentro. Gracias por los millares de noches y hoy te digo que eres mi preferida.

*f.j.s.r.

Felicidades Don Juan'i

Felicidades Don Juan’i

Me encanta escribir sobre mi infancia, porque fue la etapa más maravillosa de mi vida. El campeonato obtenido hoy por el Olimpia me trasladó de vuelta a aquellos tiempos, treinta años atrás, tenía ocho años y vivía en este mismo lugar donde estoy tecleando ahora, “su majestad del fútbol ponía frente a frente” a los contenientes de siempre pero a diferencia de hoy no había televisión aún, es más ni siquiera energía eléctrica había, y las pocas tv eran a batería de los que usan los camiones.

En el barrio a pocos metros de mi casa estaba la de don Juan’i, es un señor de pelo liso y peinado tipo taza, es de baja estatura pero con un fanatismo a prueba de fuego, su pasión es más grande que èl. Y su amor a la franja era tanto que le trajo varias alegrías pero así también le tocó sorber tragos amargos.

Con mi amigo Vicente, con el que compartía muchas horas del día jugando a la pelota en el popular partido chule’i disfrutábamos del futbol a pleno.

Los clásicos Cerro-Olimpia casi siempre se jugaban los domingos, y recuerdo que las previas lo vivíamos frente a esta casa, saltábamos, gritábamos y nos íbamos frente a la casa de don Juan a hacer hincha por nuestro querido Ciclón, mientras del otro lado salía don Juan respondiéndonos con su ajada camiseta de la franja.

Cuando terminaba los noventa minutos y si ganaba el Ciclón Vicente y yo corríamos alborotados y pletóricos de alegría rumbo a la casa de don Juan para fregarle nuestro triunfo. Sólo que nunca lo encontrábamos pues al consultarle a doña Virginia, su esposa, el paradero de don Juan’i nos contestaba que estaba escondido como un niño bajo su cama…jajaja..con mi inseparable amigo cerrista nos retorcíamos de la risa.

Pero si el resultado era a favor de los olimperos, tragános tierra, corríamos con mi petiso amigo sin rumbo desconocido, hasta donde nos dé las piernas. Y antes de emprender la huida escuchábamos desde la casa de don Juan el redoblar de la tapa de su viejo tambor quizás bailando alguna danza rara olimpista.

Un día jugando al futbol me torcí el tobillo, se me hinchó como un balón número cinco, por suerte le tenía cerca a don Chico, ya finado, era experto en articulaciones y huesos, era el màs poderoso de todo el Paraguay, con decirles que a diario desfilaban por su casa jugadores de renombre de aquella época como Virginio Càceres, Justo Jacquet y otros.

Pero a lo que voy es que, mi lesión ocurrió dos días antes de otro clásico, y estaba con una pierna encima de la silla pegado a mi radio escuchando con Vicente, hasta que el pitazo final dio favorable al Decano por la mínima diferencia después de un histórico partido. Y mi tobillo no me respondió ese día, no podía emprender mi veloz carrera hacia lo desconocido. Sólo me resigné a esperar y escuchar el retumbar de la tapa de tambor de don Juan que a lo lejos lo veía venir. Y la venganza fue terrible, lo recibí con mi cabeza hundida entre mis piernas y aún así no podía escapar del retumbar de la tapa de tambor que como hoy resuena una y otra vez en mi cabeza. Hoy don Juan ya está con varios años encima, ya no vendrá con su redoble de tambor, ni su agujerada franja negra, pero sí lo imagino sentado en su casa, reodeado de hijos adultos,nietos y nietas esbozando una pìcara sonrisa. FELICIDADES DON JUAN CAMPEON. *F.j.s.r.